El término Lambrusco indica una serie de variedades de uva tinta (de las cuales hay varios subtipos) y el vino elaborado con ellas.
Estas uvas se cultivan principalmente en la región de Emilia-Romaña en las provincias de Módena (de donde además es una maravilla denominada Vinagre Balsámico de Módena), en Reggio Emilia, en la provincia de Parma y en Lombardía en la provincia de Mantua en Italia. De hecho, a lo largo de los años, el Lambrusco se ha clasificado según las zonas a las que pertenece la vid.
Los vinos elaborados con estas uvas pueden ser ligeramente efervescentes (llamados de aguja) o espumosos; que pueden ser secos, amables o dulces y además se producen tintos, rosados y también blancos, aunque la difusión de esta última versión es escasa.
Variedades de Lambrusco
El Lambrusco se declina en numerosas variaciones, pero nos centraremos en tres variantes históricas DOC (Denominación de origen controlada):
* Lambrusco di Sorbara
* Lambrusco Salamino de Santa Croce
* Lambrusco grasparossa de Castelvetro
1- Lambrusco di Sorbara DOC
Se obtiene de la vid del mismo nombre. Se produce en las zonas de la provincia de Módena. Para la elaboración de este vino se debe utilizar al menos el 60% de las uvas de la cepa homónima, con posibles adiciones de Lambrusco Salamino hasta un máximo del 40% y otro Lambrusco (solo o en conjunto) hasta un máximo del 15%.
Suele tener un color rubí claro, con una espuma ligeramente rosada; es la más clara de las tres variedades de Lambrusco DOC de la provincia de Módena.
Caracterizado por un aroma fresco, con fragancias afrutadas y una nota característica y marcada de violeta, que representa el carácter más típico e inconfundible de este vino y determina su apodo: “Lambrusco della viola”.
De sabor delicado, sabroso, armonioso, agradablemente ácido, ligeramente aromático y afrutado, debido a su alta acidez y cuerpo poco pronunciado, es un vino muy agradable de beber cuando es joven.
Maridaje: Su agradable sabor lo hace perfecto como acompañamiento de platos locales como pasta con salsa blanca, tortellini en caldo y asados.
2- Lambrusco Salamino de Santa Croce DOC
Esencialmente deriva de la vid que lleva su mismo nombre, Lambrusco Salamino. La disciplinaria de producción relativa prevé la posibilidad de que entre las uvas Lambrusco Salamino sea posible la presencia, a nivel de planta, de otras cepas de Lambrusco Ancellotta y Fortana, localmente denominadas "Uva d'Oro", en un pequeño porcentaje.
Se produce con un mínimo del 90% de uvas de la cepa autóctona Lambrusco Salamino, con pequeños porcentajes de otras cepas como Lambrusco Ancellotta y Fortana que solas o en conjunto, pueden contribuir a la producción de este vino, hasta un máximo del 10%.
Tiene un color rojo rubí profundo con una espuma con ribetes violáceos.
El aroma es fresco, afrutado, fino, persistente, con un característico aroma vinoso intenso, que recuerda a fruta madura.
Sabor sápido, armonioso, delicadamente ácido, fresco, tiene un cuerpo medio, pero con justa presencia y una graduación alcohólica moderada.
Maridaje: Vino sencillo, no exigente, es agradable a todos los paladares y va a la perfección no solo con la típica "pasta seca" de la cocina Emiliana, sino también con preparaciones más robustas de primeros platos en general y con asados, especialmente si está elaborado con carne blanca o cerdo.
3- Lambrusco Grasparossa di Castelvetro DOC
La cepa de la que se elabora este vino es Lambrusco Grasparossa. La disciplina de producción prevé la posibilidad de que Lambrusco Grasparossa pueda ir acompañado, a nivel de planta, de otras cepas de Lambrusco, Fortana (llamada localmente "Uva d'Oro") y Malbo Gentile. En un porcentaje modesto. Por lo tanto, se puede decir que este vino se obtiene sustancialmente solo de la vid del mismo nombre.
Es un vino DOC cuya zona de producción se encuentra íntegramente en la provincia de Módena. Se cultiva en los suelos secos de las llanuras y colinas de Módena, dominados por villas señoriales y castillos antiguos. También se conoce como Lambrusco di Castelvetro.
Este vino se obtiene con al menos un 85% de las uvas de la cepa del mismo nombre y no se puede combinar en más del 15% de otras cepas de Lambrusco, Malbo Gentile y Fortana.
De color rubí intenso, con reflejos violáceos tiene una espuma de color cereza.
Fuertemente aromático, con aromas más amplios que otros tipos de Lambrusco, intenso, afrutado, fragante, complejo, que recuerda también el aroma de la uva.
De sabor sabroso, armonioso, agradablemente vinoso, acidez equilibrada, ligeramente afrutado, con un retrogusto amargo agradable, el tipo seco es un vino de buena textura y bien estructurado: entre los tipos de Lambrusco D.O.C. se dice que es el que tiene el cuerpo más pleno y más presente.
Maridaje: Grasparossa es perfecto con platos sabrosos y sustanciosos, con primeros platos con carne, lasaña y asados; una excelente combinación es también la de salami y quesos típicos de la tradición emiliana, o con quesos curados o azules. El tipo dulce combina perfectamente con postres como pasteles secos y dulces típicos de Módena.
Seguramente sabes que el lambrusco es uno de los vinos más vendidos en el mundo, pero no goza de especial reputación entre algunos “aficionados”, algunos “críticos” y amateurs en general, especialmente fuera de Italia.
En este post: En el centro de la polémica. ¿Es el Lambrusco un buen vino? hablamos un poco de por qué tiene tan mala reputación y de si es o no un buen vino.
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