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Mujer de espalda sostiene con una mano su sombrero y eleva con la otra mano una copa de vino

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DEL MUNDO DEL VINO Y MÁS

Entonces, ¿los vinos mejoran con la edad o no?

Seguramente has escuchado la frase: “Estás como el vino, mientras más viejo más divino”.

Resulta que en el sentido estricto de la palabra esto no se cumple, ya que solo sucede con menos del 10 % de todo el vino que se embotella que “la edad los haga más divinos”.


Mujer soplando una botella de vino con mucho polvo

La mayor parte de los vinos, los rosados y casi todos los blancos, los tintos jóvenes de precios más económicos dirigidos al público general, se producen para ser bebidos en el año que sigue a su embotellado o máximo 2 años después.


Sin embargo, los mejores vinos, los más caros sobre todo de Italia y Francia, se conciben expresamente para ser conservados durante muchos años o incluso décadas tras su salida al mercado.


Por regla general (según expertos) cuanto más caro es un vino dentro de una determinada categoría, más tiempo puede envejecer (y digo envejecer, no que el vino sea mejor mientras más caro, eso es material para otra entrada).


¿Qué determina la longevidad de un vino?


La longevidad en general está determinada por la presencia de sustancias como ácidos, taninos, minerales y azúcares.


Los vinos de mayor longevidad son aquellos que contienen un mayor porcentaje de estos componentes, que a su vez están estrechamente ligados a las características intrínsecas de la variedad de uva (contenido en azúcares y ácidos en mostos, taninos en hollejos y pepitas) y a las técnicas de vinificación o crianza en barrica que precede al embotellado.


En general, podemos decir que los vinos alcohólicos, tánicos, envejecidos en madera, dulces con un alto contenido en extractos se conservarán más tiempo que los vinos blancos secos, bajos en alcohol, con baja acidez y envejecidos en acero.


La acidez es, de hecho, una de las principales características de un vino longevo, de la que depende su vida útil. En segundo lugar, la presencia de taninos, sustancias con altas propiedades antioxidantes, permite que las propiedades organolépticas de un vino se conserven en el tiempo, que así logra evolucionar y afinar. El afinamiento es el proceso de maduración que realiza el vino hasta que alcanza su punto máximo de desarrollo, tras el cual es posible abrir la botella de vino para degustarlo en su máximo potencial. Para que esto suceda, es fundamental respetar los métodos de almacenamiento de las botellas en un entorno que cumpla ciertos requisitos para no arruinar el vino.


¿Cuánto se pueden conservar los vinos?


Si se busca evaluar la capacidad para envejecer del vino se recomienda hacerlo caso por caso de acuerdo con reglas generales, porque existe un abanico muy amplio, desde los 6 meses hasta veinte años y más.


No obstante en función de sus características y dependiendo de todos los factores que hemos enumerado pudiéramos seguir estas recomendaciones:


Vinos blancos

Copa de vino blanco

Los vinos blancos jóvenes se recomienda beberlos dentro de los 6 meses y como máximo 15-24 meses después de la vendimia.

Algunos ejemplos:

-Vinos de mesa - hasta 1 año (idealmente unos meses)

-Pinot grigio - hasta 2 años

-Sauvignon blanc, sancerre - de 1 a 2 años

Vinos blancos más estructurados se pueden degustar después de un almacenamiento en bodega que va de 3 a 4 años.


También existen blancos caracterizados por una alta acidez y contenido mineral que los hace particularmente longevos (de 3 a 15 años), por ejemplo: Riesling, Traminer Alsaziano, o los del Alto Adige, subzona de Terlano en Italia.


Vinos rosados

Copas de vino rosado en una mesa

Casi todos los vinos rosados se encuentran en su mejor momento con 1-2 años desde la vendimia. Mejor beberlos lo más jóvenes posibles.


Vinos tintos

Copa de vino tinto girada mientras recibe el vino de la botella

Un tinto joven se recomienda consumirlo antes de dos años desde su embotellado dependiendo de si ha pasado por barrica algunos meses o no.


En principio, un vino tinto si es de cuerpo medio, debe consumirse en tres o cuatro años, pero si es un tinto de crianza necesitará más tiempo para afinar sus cualidades y se puede degustar también 15 años después de la cosecha.


Algunos tintos importantes como Barolo y Barbaresco, Nebbiolo en general, Aglianico (especialmente Taurasi DOCG) pueden mejorar incluso hasta 10-15 años después de la cosecha y continuar evolucionando hasta 20 años o más, si se almacenan correctamente.


Algunos ejemplos a tener en cuenta:

-Vinos de mesa - hasta 1 año (idealmente unos meses)

-Zinfandel/primitivo - de 2 a 12 años

-Pinot noir - de 2 a 15 años

-Sangiovese, Chianti y Chianti classico, Brunello di Montalcino - de 3 a 12 años

-Cabernet franc - de 4 a 16 años

-Buen merlot - 4 a 18 años

-Tempranillo, Rioja, Ribera del Duero - de 4 a 20 años

-Shiraz/Syrah - de 5 a 25 años

-Buen Cabernet Sauvignon - de 5 a 25 años

-Nebbiolo, Barolo, Barbaresco - de 10 a 30 años


Vinos espumosos

Varias manos brindando con copas de vino espumoso y luces al fondo

Estos son vinos que con el paso del tiempo van perdiendo gas carbónico. Por ello, se recomienda consumirlos en el año, con un periodo máximo de dos años en buenas condiciones.

Como siempre depende de las características particulares de cada vino.

Algunos champanes son la excepción.


Ejemplos a tener en cuenta:

-Prosecco, Asti, Moscato, Spumante - mientras más jóvenes mejor

-Cava - de 1 a 2 años

-Crémant - de 1 a 2 años

-Champán sin añada - de 1 a 5 años

-Champán de añada - de 1 a 10 años


Vinos Fortificados o generosos

Copa de vino fortificado o generoso encima de un libro con gráficas de una botella de vino.

Estos vinos de manera general salen al mercado cuando están a punto para su consumo.

Los vinos Jerez del tipo Amontillado por ejemplo es conveniente no conservarlos en la botella más allá de 24 ó 36 meses pues pueden perder parte de su "frescura" y con ella algunas de sus características más distintivas.

Nuevamente depende de las características de cada vino en particular


Algunas excepciones son:

-Oporto single quinta vintage de 2 a 20 años

-Oporto vintage de 15 a 40 años.


Algunas consideraciones a tener en cuenta


Es importante señalar que si un vino tiene buena longevidad pero usted no tiene condiciones para almacenarlo, no debería pensar en dejarlo envejecer esperando a que afine sus características. Es preferible consumirlo en unos pocos meses después de comprado, independientemente del tipo de que se trate.

Los cambios de temperatura verano/ invierno, la humedad ambiental excesiva o demasiado baja, la presencia de luz, son solo algunos de los factores que pueden comprometer incluso las mejores botellas. (De este tema puedes encontrar más información en el post: Consejos para crear una cava en casa)


El vino no debe llevarse al límite de su duración, sino al valor máximo de la curva de evolución, más allá del cual, lenta pero seguramente, incluso los vinos más longevos verán decaer su agrado gustativo.


 

Espero que este post te haya servido de ayuda para entender más y mejor el mundo del vino.

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Hasta pronto! ;)


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